Intervención del presidente de la Asociación 11-M Afectados del Terrorismo, Eulogio Paz, en el Parlamento Europeo.
Para mí, Eulogio Paz Fernández, presidente de la Asociación 11-M Afectados del Terrorismo, la mayor asociación de víctimas del terrorismo de la Comunidad de Madrid, tiene un significado especial estar en sede europea, en el Parlamento Europeo, el cual a raíz de los atentados yihadistas del 11 de marzo de 2004 (el mayor atentado en Madrid, en España y en suelo europeo) instituyó la fecha del 11 de marzo como el Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.
Por lo tanto, vaya por delante mi recuerdo a todos los familiares de asesinados y heridos en atentados terroristas cometidos en Europa y mi condena expresa del terrorismo.
El terrorismo no tiene ninguna justificación, pero sí es necesario explicarlo. Es necesaria la “comprensión del fenómeno terrorista”.
Aunque la comunidad internacional aún no ha adoptado una definición general de terrorismo, en declaraciones, resoluciones y tratados «sectoriales» universales vigentes relacionados con aspectos concretos del terrorismo, se definen ciertos actos y elementos básicos. En 1994 la Asamblea General aprobó la Declaración sobre medidas para eliminar el terrorismo internacional en su resolución 49/60, en cuyo párrafo 3 señaló que el terrorismo incluye «actos criminales con fines políticos concebidos o planeados para provocar un estado de terror en la población en general, en un grupo de personas o en personas determinadas», y que esos actos son «injustificables en todas las circunstancias, cualesquiera sean las consideraciones políticas, filosóficas, ideológicas, raciales, étnicas, religiosas o de cualquier otra índole que se hagan valer para justificarlos» (OFICINA DEL ALTO COMISIONADO DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LOS DERECHOS HUMANOS “Los Derechos Humanos, el Terrorismo y la Lucha contra el Terrorismo.” Folleto Informativo nº 32).
Así tenemos que, a lo largo y ancho de la historia europea, determinados colectivos han utilizado y siguen utilizando el terrorismo para alcanzar objetivos de independencia, de dominación religiosa, de supremacía racial, de poder político, en definitiva. Terrorismo nacionalista, terrorismo de extrema izquierda, terrorismo de extrema derecha y terrorismo yihadista son los pilares fundamentales del terrorismo a día de hoy.
“La comprensión del fenómeno terrorista” es insuficiente con la sola explicación de “buenos y malos”, con el negacionismo de los conflictos. ¿Los terroristas matan por droga, por dinero, por el placer de matar? No. Hay objetivos políticos, económicos o religiosos, que pueden ser legítimos o no. Por eso, aunque un crimen machista pueda ser más horrendo que un atentado terrorista, no hablamos de “terrorismo machista”. La palabra terrorismo está asociada con la palabra política y lo que hace ilegítimo y condenable al terrorismo es la forma de resolver las discrepancias; esto es, asesinando al diferente, sembrando el terror entre las personas y en la sociedad en su conjunto. La forma de resolver los conflictos sólo ha de ser a través de la política en democracia.
Maneras diferentes de resolver los desacuerdos las estamos viendo recientemente en Europa. Escocia (aunque Gran Bretaña ya no está en Europa) está tratando de resolver su deseo de independencia por la vía democrática y política; no impera un grupo que trate de resolver la situación a través del terrorismo. La propia Irlanda del Norte, que en el pasado sufrió los atentados terroristas del IRA, hoy contempla como sus aspiraciones nacionalistas pasan por refrendos democráticos y no por la actividad terroristas. El reciente atentado terrorista en Estambul, que condenamos de forma categórica, es indicativo de que hay quienes siguen tratando de resolver los posibles conflictos mediante el terror y no por la vía política.
“Tomar posesión de un escaño siempre es preferible a empuñar las armas”, dijo José María Aznar (miembro del Partido Popular) en 1998, cuando era presidente del Gobierno de España, en los días en que ETA existía y asesinaba. Una ETA al que el propio Aznar llegó a llamar “Movimiento Vasco de Liberación”. Una ETA hoy vencida gracias a la presión policial, judicial y social. Una ETA derrotada por el Estado de Derecho.
Javier Maroto, actual miembro del Partido Popular en el Senado de España, en su defensa de pactar con Bildu ha dicho: “No me tiemblan las piernas para llegar a acuerdos con nadie. Y creo que eso es bueno. Ojalá sucediese en más foros. Ojalá cundiese el ejemplo”.
Nosotros también decimos ¡Ojalá! Decimos que ojalá mañana, ¡mejor hoy mismo!, las organizaciones terroristas yihadistas o cualquier otro grupo terrorista existente hagan un comunicado diciendo que dejan de matar, como lo hizo ETA hace ya más de once años. Si los islamistas, cristianos, judíos o creyentes de cualquier otra religión o creencia dejan de matar y se comprometen a predicar su fe o ideario solamente mediante la palabra, no podremos decir que: “lo que no han conseguido matando, no lo van a conseguir ahora”. En todo caso, para afrontar “dichas fes e idearios” está la tarea educativa, el trabajo político, la toma de conciencia de la importancia de una sociedad laica en la que cada cual pueda ser libre de creer en quien quiera sin que la sociedad y el Estado de Derecho se sientan esclavos de dichas “fes e idearios”.
30 de noviembre de 2022