Los mares sustituirán al revólver
algo así decía Ismael.

Los mares serán la salvación y la espera
y en ellos olvidarás lo que habías sido
y en ellos recordarás lo que habías sido
quizá ya no qás esás poemas
como le sucedió a aquel adolescente furioso que huyó a traficar con esclavos.

El silencio lapidará los aquelarres y un dulce amor la danza con las brujas
miraras a aquella distancia como a una señora mejor que aquella cadavérica
soledad de urbanita.

Ya no más aquel caminante perdido
sumergido en smog
buscando en los callejones
no más palabras sedientas engullendo pasajeros.

Los mares sustituirán al revólver
al maquillaje
a la noche demasiado alegre
alegre como los locos.

No te carbonizarán la memoria aquellos humos de antiguas plantas sagradas
Pervertidos por hombres blancos,
Blancos disfrazados de extraterrestres pero más terrestres que la huída.
No te carbonizarán la memoria los cazas, los bombarderos
las luces sobre Bagdad, las casa derruidas.

Tu burka sólo tapa los ojos los oídos y te deja la boca y el sexo al descubierto.
para que comas, para que folles, para que estalles.

¿O era el viaje?
Cada huída es una y muchas
¿O era el viaje?
Lo que sustituía a aquel revólver sediento
¿O eran las palabras, las palabras las que te volaban la cabeza?
O eran las calles, aquellas calles
todas las ciudades son una y muchas
todos los callejones olvidan y permanecen.
¿O es el pasado el que te droga y no te permite ver a los lados?

Alegre, alegre como los locos
como aquella señora vampiro llamada Carmilla o no séé
que te pedía silencio, silencio como a los locos
mientras los sabios hablan, exclaman, torturan gente
dividen países, celebran juicios
firman sentencias
mientras los lúcidos beben whisky y ganan dinero
y lo compran todo
los mares sustituirán al revólver
la sangre negra, la tierra desolada
el silencio lapidará elándalo
y no habrá esáculo
ni palabras sedientas engullendo a los pasajeros.